El Real Madrid obtiene una victoria de mérito para cerrar el año (74-91)

Llegaba el Real Madrid a Vitoria tras el palo recibido el viernes en Estambul, en la ciudad vasca les esperaba el Kirolbet Baskonia dispuestos a reeditar las ultimas dos finales nacionales tanto la Liga Endesa como la Supercopa de España.

El encuentro comenzaba con la sorpresa de Santiago Yusta en el quinteto titular por parte de los blancos. Los primeros minutos dejaban ver la posibilidad de un partido de intercambio de canastas. Pero llegaron la pareja de moda del equipo blanco, en defensa Edy Tavares ponía el candado al aro blanco mientras que Facundo Campazzo daba canastas fáciles al resto del equipo, en especial a Yusta, el canterano puso una señal en la esquina del campo y desde ahi aprovechó los balones del base argentino. El equipo blanco consiguió un parcial de 0-14 en este cuarto y llegó al final del mismo con el marcador 12-26 a su favor.

El segundo cuarto arrancaba con dos tiros libres  de Ilimane Diop que conseguía romper la sequía del equipo baskonista, el equipo blanco parecía un poco aturdido por el aumento del nivel defensivo del equipo local, pero con un 2+1 de Jeffery Taylor el equipo blanco conseguía volver a entrar en el encuentro y sacar al Kirolbet Baskonia que apenas conseguía anotar un punto en tres minutos, en ese momento el marcador lucía 13-31 a favor del equipo blanco siendo la máxima diferencia del encuentro hasta el momento. El equipo local apoyado por su público y lanzado por Luca Vildoza con 8 puntos conseguía un parcial de 10-2 . Tiempo muerto de Pablo Laso para frenar el parcial abierto del equipo vitoriano. Con la vuelta de Facundo Campazzo y Edy Tavares, el equipo blanco consiguió cambiar otra vez el ritmo del encuentro, el partido llegaba al descanso con un 32-47 a favor del equipo blanco. en esta primera parte cabe destacar los números tanto de Campazzo con 5 asistencias como de Tavares con 7 puntos, 7 rebotes y 2 tapones.

Tras la reanudación, el Real Madrid volvía al encuentro con el mismo quinteto que en el primer cuarto y otra vez le volvió a salir cara al equipo blanco esta apuesta. A pesar de un gran inicio del equipo local con un parcial de 8-0 a su favor, pero entonces Facundo Campazzo, tras una antideportiva señalada por una falta sobre Tornike Shengeila que acabaría con este fuera del encuentro, se puso el traje de faena y volvió a cambiar el encuentro. Mientras el argentino dirigía, Trey Thompkins y Santi Yusta disparaban al equipo blanco en el marcador gracias a su acierto en el tiro de tres puntos y Edy Tavares volvía a imponer el terror en la zona blanca. 0-15 de parcial para el equipo blanco que obtenía la máxima ventaja del partido con un +24 en el marcador. El tercer cuarto acababa con un marcador de 48-74 y con la máxima diferencia de todo el encuentro.

El último acto empezaba con el partido roto y con ambos equipos desacertados de cara al aro, Matt Janning conseguía anotar la primera canasta del cuarto. Por su parte el Real Madrid dirigido por un gafado Sergio Llull, no encontraba entrar en el partido y recibía un parcial de 8-0 cortado por un tiempo muerto de Pablo Laso con un 56-74 en el marcador. Tras el parón, el técnico vitoriano volvía a confiar en el mas acertado de la noche como fue el argentino, Facundo Campazzo, que en este último cuarto realizó un papel mas anotador que de organizador. Kirolbet Baskonia conseguía maquillar el resultado de la mano de un gran Marcelinho Huertas que acabaría el encuentro con 24 puntos, la gran mayoría conseguidas en este periodo. Trey Thompkins con unos buenos minutos finales consiguió varios triples finales para acabar como máximo anotador del equipo blanco con 19 puntos. El encuentro concluía con una canasta del base brasileño del Kirolbet Baskonia y un resultado en el marcador 74-91 a favor de los madridistas.

Con este partido el Real Madrid culmina el año 2018 por todo lo alto, con una gran victoria en un campo complicado y con un equipo que no regala nada. Ahora toca descansar para recibir al Maccabi Tel Aviv el 3 de enero en la capital española.

Foto: ACB PHOTO