La derrota en la pasada final de Copa trajo consigo el habitual aluvión de rumores que suele suceder a los tropiezos dolorosos en el Real Madrid, aunque esta vez dichos rumores tuvieron un cariz diferente: si normalmente se apunta hacia posibles refuerzos como cortina de humo esta vez el ruido generado vino dado por posibles salidas, aunque sin descartar alguna incorporación para cubrir las mismas.
Y es que hace una semana parecía saltar todo por los aires en la sección, siendo la marcha de Dennis Smith el pistoletazo de salida a esta situación. Diversas informaciones apuntaban a que el jugador americano estaba con pie y medio fuera del equipo, esgrimiendo falta de adaptación y de forma física como los principales motivos de su rescisión. A día de hoy no hay confirmación oficial en un sentido u otro, lo que conociendo la “agilidad” en la comunicación del club tampoco quiere decir gran cosa, ya que todos recordamos el episodio de Carroll apareciendo como miembro de la plantilla meses después de haberse retirado.
Pero el del escolta americano no fue el único susto para los responsables del baloncesto blanco. En cuestión de horas trascendió el malestar de Serge Ibaka, descontento por su rol en el equipo y por el uso que Chus Mateo hace de él, situación que alcanzó su punto álgido en las inexplicables idas y venidas del pívot en la rotación durante el fin de semana copero. Una vez más el club ha mantenido el hermetismo con respecto a la situación del jugador, aunque diversos rumores apuntan a que el mismo ha recapacitado y está por la labor de seguir en la plantilla.
Pero no sería una semana post derrota sin una buena filtración de fichaje, y aunque se hizo de rogar, apareció en el horizonte la posibilidad de fichar a Patrick Beverley. El controvertido base estadounidense está libre tras haber rescindido recientemente su contrato con el Hapoel de Jerusalén, y es que su nombre ya había sonado con anterioridad para unirse a la disciplina blanca. De recalar en el conjunto madridista, lo haría ocupando el hueco que dejaría libre la salida de Dennis Smith.
En resumidas cuentas, parece que a cuatro días de que cierre el plazo de inscripciones para los equipos Euroliga hay bastante ruido en torno a la plantilla blanca, y no conviene descartar ningún escenario. Incluso la salida del ya mencionado Smith, que se daba por hecha, parece estar en punto muerto, al menos de cara al exterior. Desde luego no parece la situación ideal de cara a afrontar un último tramo de liga regular que se antoja complicado en la lucha por salvar los muebles en la máxima competición continental.
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