Baskonia da la campanada 90-94 y quita el factor cancha al Real Madrid (0-1)
Ambiente de final en el Palacio de los deportes, engalanado para la ocasión. Una afición metida desde el comienzo y dos equipos que eran perfectamente conscientes de lo que había en juego y así lo dejaron patente desde el minuto 1. Tanto Real Madrid como Baskonia salieron a por todas y encontraron en los triples, Baskonia, y en las canastas zonales, Real Madrid, su arma particular para superar las intensas defensas que tenían enfrente.
Pero si hablamos de defensa hay que hacer mención aparte a Tavares. Más allá de sus 8 puntos en el primer cuarto, el caboverdiano se hizo dueño y señor de la zona e intimidó. Fruto de ello, Baskonia tuvo que explotar sus otras muchas virtudes y, concediendo solo una segunda oportunidad, consiguió minimizar el efecto del gigante blanco para irse dos puntos arriba al final del primer cuarto (17-19).
En el segundo cuarto, los vitorianos mantuvieron su buen hacer pero, esta vez, con un nuevo pilar en el que sustentarse, Poirier. El francés anotó 10 puntos en el periodo y fue uno de los grandes artífices de que los de Pedro Martínez liderasen prácticamente hasta el bocinazo final. Y, si no fue en la totalidad fue gracias a Jaycee Carroll y Felipe Reyes. Los dos veteranos del Real Madrid tiraron una vez más —y van muchas esta temporada— del carro.
Primero, Carroll con dos triples y, segundo, Felipe encauzando las aguas cuando peor lo estaba pasando el su equipo (24-31, min. 16:07). Ambos pusieron serenidad y enfriaron un ambiente muy crispado por varias posibles faltas no señalas a favor de los de Laso, muy protestadas por el equipo y que acabaron costándole la técnica a Rudy Fernández. Pese a ello y gracias a una canasta sobre la bocina de Doncic, el conjunto merengue consiguió empatar el duelo y enfiló a vestuarios con un 39-39 campeando en el marcador.
Un tercer cuarto muy tenso y próspero para Baskonia
La reacción blanca en el final del segundo cuarto se frenó en seco con la vuelta del descanso. Baskonia, bien plantado y con las ideas claras, siguió a lo suyo y apenas sufrió los arreones del Real Madrid. Sí, los de Laso consiguieron ponerse por delante pero muy levemente. La batuta de verdad corrió a cargo baskonista y quedó demostrado en el último minuto de periodo donde, los de Pedro Martínez, consiguieron poner la máxima renta del partido (58-67) tras un triplazo de Janning sobre la bocina.
Reaccionó, o lo intentó, el Madrid nada más comenzar el periodo definitivo. 5-0 de salida y la afición pensando en que de ahí a la luna. Pero no, había que sufrir. Shengelia, con fortuna, devolvió el parcial y vuelta a remar (63-72). En ese instante otro buen parcial blanco, con triple de Llull al contraataque incluido, reducía las distancias al mínimo (70-72, min 34). Ahí emergieron como ningunas las figuras de Vildoza y Jaycee Carroll. Echándose el equipo totalmente a las espaldas, pusieron los puntos y la emoción a un partido que llegaba a su fin con máxima igualdad.
El Madrid consiguió ponerse por delante tras varios intentos (82-79) pero quedaba demasiado por jugarse. Falló el pulso en ataque y Ayón cometió dos faltas tontas en ataque que apretaron de nuevo del todo el marcador (82-82, min 37:45). Y ahí, sí, Baskonia no dejó pasar la oportunidad brindada por el pívot mexicano. Shengelia y Vildoza no fallaron desde la línea de personal (cosa que sí hizo Ayón) y Baskonia tomaba aire 84-88 con solo 23,5 segundos por delante. El Madrid falló su ataque y Vildoza, desde 4,75 dio la puntilla. Llull anotó un triple a una mano y con la izquierda y daba una mínima esperanza (87-90) con 8 segundos por delante. De nada sirvió porque Voigtmann no falló en los libres y… Jaycee Carroll dio una nueva esperanza con un rápido triple (90-92), pero se quedó en eso, una esperanza.
Imagen: Firmar ACB Photo/E. Cobos
