Tras la dolorosa derrota del viernes en Belgrado, en un partido que se dominó por 10 puntos a mediados del tercer cuarto, el Real Madrid voló por la noche a Vitoria, desde donde cogió un autobús que le llevó a Bilbao. Ya saben, los caprichos del calendario.
Con la cabeza aún puesta en los errores de la Euroliga, donde prácticamente no queda margen de error, el Real se encuentra un partido de ACB contra el Dominion Bilbao Basket que, sinceramente, importa más bien poco a la gran mayoría de la afición blanca, que seguro piensa más en el choque del próximo jueves contra el Fenerbahce que en este compromiso liguero.
No por ello el equipo debe salir relajado. No se lo puede permitir en la situación en la que está: un varapalo en Miribilla (algo que se ha repetido más de una vez en los últimos años) supondría otro golpe anímico para un grupo ya bastante tocado. Por el contrario, un buen partido podría servir para trasladar de una vez la positiva inercia en ACB a la Euroliga. Sito Alonso, entrenador de Bilbao, declaró en la previa que «el Real Madrid está por encima del resto de equipos de la Liga», algo que puede ser interpretado como estrategia para quitarse presión.
Dominion Bilbao Basket, que cuenta con un balance de 4-3 en ACB, cuenta con una plantilla que mezcla jueventud (Alex Suárez, Dejan Todorovic, Tobías Borg) con experimentados veteranos (Alex Mumbrú, Raul López o Shawn James). Se espera ambiente de partido grande en Miribilla. Ahora únicamente queda ver qué cara del Real Madrid veremos: si la de ACB o la de Euroliga.
Pablo Herrero – @pablohm29
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